El Sistema Portugal salva vidas en zonas populares de Lisboa
Avalado por un estudio de la Unión Europea como una de las 50 mejores prácticas sociales del continente, el programa de orquestas juveniles e infantiles de Portugal está ayudando a niños y a sus familias a superar situaciones difíciles, gracias a la práctica de la música
Antonio Wagner no ha perdido su capacidad de asombro ante “los milagros” que está haciendo El Sistema en su país, desde que fue establecido en 2007, inspirado y fundado por El Sistema venezolano. Una de esas tantas historias, cuenta él mismo, es la de un niño que durante 3 años tuvo que dormir con una navaja en su cama por temor a que su hermano mayor, esquizofrénico, lo asesinara. “Hoy día, gracias a la orquesta y a sus amigos del núcleo, hemos podido salvarlo mental y afectivamente, y lo logramos con música”.
Barítono profesional, Wagner es el presidente de la Asociación Orquesta Geraçao, El Sistema Portugal, y también preside el Conservatorio de Música de Lisboa. Narra que comenzaron con 15 niños y ahora tienen 1000 alumnos que hacen música en 13 núcleos, ubicados en los llamados Barrios Sociales de Lisboa, y ahora comenzando con otro en Coimbra, ciudad donde hay un núcleo. Subvencionados por el Ministerio de Educación, 80 profesores comparten y lideran esta experiencia que está cambiando la vida de niños, jóvenes y familias de esas comunidades deprimidas económica y socialmente.
“Para nosotros lo más importante es el trabajo en colectivo, y son tan importantes los niños como sus padres y madres. Toda la familia entonces se involucra. Nuestro programa es totalmente de acción social; a través de la música queremos darle a estos niños y jóvenes la oportunidad de que tengan una profesión u oficio, más allá de que vayan a ser músicos o no”, señala.
Otra premisa en la que fundamenta su acción El Sistema Portugal, es en la dinámica afectiva que se genera dentro de las orquestas: “Para que los niños jóvenes de estos barrios puedan superar historias terribles, es importante darles amor, darles afecto, no solo el trabajo técnico y musical es efectivo, también hay que compartir con ellos, escucharlos, dar un paseo y atender lo que están viviendo en sus corazones”, apunta Wagner.
El impacto de El Sistema Portugal, que fue asesorado y orientado desde su inicio por tres músicos venezolanos de El Sistema –Pedro Saglimbeni, Beatriz Manzanilla y Juan Carlos Maggiorani-, ha sido objeto de estudios y fue avalado e incluido por la Unión Europea como uno de los 50 mejores programas de práctica social de Europa.
Por su parte, Juan Carlos Maggiorani, director artístico de El Sistema Portugal, habla con orgullo de los logros alcanzados hasta ahora: “Tenemos la Orquesta Juvenil Geraçao, que tiene 160 músicos entre los 14 y los 20 años de edad; también una orquesta infantil, con 248 integrantes, entre 8 y 14 años de edad, y, tenemos un programa de Iniciación musical con 400 niños entre los 2 y los 6 años de edad. Pero lo más importante es que estamos atendiendo una población infantil con muchos problemas, entre ellos muchos inmigrantes provenientes de Cabo Verde, Mozambique y también de Europa del Este”.