Yda Palavecino aporta su calidad humana a la música y la educación
Es principal de la fila de los segundos violines de la SSB, y docente de esta cátedra dentro de El Sistema. Sigue apostando por el crecimiento del proyecto del Maestro Abreu, al cual ha dedicado 26 años de carrera profesional
Si bien su formación musical no se inició dentro del grupo de pioneros del Sistema Nacional de Orquesta y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, el 5 de diciembre de 1991 cuando ingresó a las filas de los segundos violines de la Sinfónica Simón Bolívar (SSB), lugar en el que reafirmó su pasión, y asumió el compromiso del proyecto social y musical que inició el Maestro José Antonio Abreu hace 43 años.
“El Maestro buscó organizar el movimiento musical venezolano de enseñanza y hacerla accesible, ese el mejor ejemplo de integración y compromiso social con el país. Definitivamente es un gran reto estar aquí, seguir tocando y seguir formando a los nuevos músicos. Yo he visto lo que llaman el milagro musical y no es un milagro, es el resultado de la integración entre músicos, el compromiso de seguir con el sueño del Maestro, la pasión que nos genera tocar música y el reto de seguir tocando y luchando”.
A lo largo 26 años dentro de las filas de la Sinfónica Simón Bolívar, agrupación orquestal próxima a cumplir 40 años de labor ininterrumpida, ha visto como más allá de ser un grupo de músicos tocando juntos, se han convertido en una familia.
“Aquí hay matrimonios entre compañeros, todos nos convertimos en los tíos y hasta abuelos de los niños que nacen. Los pequeños se crían con la música que tocamos y esto es algo que no se puede detener, es la herencia que todos dejamos. Tu familia está involucrada con El Sistema, cada cosa que pasa desde lo más terrible hasta lo más sublime a nosotros llega de manera muy cercana. Sentimos las muertes y celebramos los nacimientos, el familiar que no sabe nada de música o el novio que llega para acompañar a la novia al ensayo termina involucrándose, por eso considero que permanecer es un legado familiar”.
Para Yda Palavecino, celebrar el 40 aniversario de la Sinfónica Simón Bolívar es rememorar todos los procesos que ha vivido desde que ingresó a la orquesta “Yo entré cuando tenía 22 años y los que fueron mis profesores como Sergio Cellis o Ramón Román ahora son mis compañeros. Sé lo que es ser la novata del grupo, pertenecer al grupo de los músicos de larga data dentro de la agrupación y estar presente en la formación de nuevos músicos para El Sistema. Aquí se integran los músicos que tienen más de 30 años tocando, con los nuevos ingresos. Estar aquí hace que vivas ricas y variadas experiencias”.
El compromiso de la violinista Yda Palavecino es muestra de la calidad humana que tienen los integrantes del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, cuyo órgano rector es la Fundación Musical Simón Bolívar, adscrita al Ministerio del Poder Popular de del Despacho de la Presidencia y Seguimiento de la Gestión de Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela.