José Viera sigue con entusiasmo su preparación para desarrollar su carrera como solista
Tras recibir el primer lugar del II Concurso Internacional de Violín Frank Preuss que se otorga en Colombia, se presentará con la SSB en la apertura del Ciclo Brahms, que este fin de semana comienza su serie de conciertos en el Cnaspm
Dueño de una réplica del Guarnerius que perteneció a Paganini regresó a Venezuela el violinista barquisimetano, José Viera. Resultó ganador del primer lugar en el II Concurso Internacional de Violín Frank Preuss, luego de superar varias rondas eliminatorias, y tras ser admitido entre el grupo de mejores aspirantes a la distinción creada en la ciudad de Ibagué, en honor al músico alemán que ha desarrollado un gran escuela de violín en Colombia.
El triunfo lo sorprendió en la ceremonia final de la competencia, tanto como la coincidencia de haber tocado, el día anterior, el instrumento fabricado especialmente para ser entregado al ganador. La joya la recibió como parte del premio obtenido en una de las celebraciones musicales más importantes de la nación vecina. El joven músico formado en el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela se impuso entre un grupo de once participantes de distintas partes del mundo.
Fueron los maestros Sergio Celis y Francisco Díaz quienes lo propusieron para presentarse en esta importante competencia. Viera comentó que tras recibir la información, acudió inmediatamente al fundador de El Sistema y primer director de la Escuela de Violín, José Francisco del Castillo, quien no dudó en trabajar incansablemente en el perfeccionamiento del repertorio, con la convicción de que sus dotes técnicos y artísticos no pasarían inadvertidos para el jurado calificador. “A estos tres maestros les debo este logro. Es un estímulo muy grande para continuar preparándome y desarrollar mi carrera como solista”, expresó.
-¿Además de la experiencia y los premios qué aprendizaje le deja haber participado en esta competencia?
-Primero que nada se invierte mucho en la preparación. Las rondas eliminatorias fueron de una exigencia tremenda, y cada día terminaba agotado no sólo físicamente y mentalmente, sino diría que hasta espiritualmente. Sin embargo, valió la pena. Aunque yo no esperaba ganar, trabajé muy duro, y mis conversaciones con el maestro Del Castillo apuntaban a destacarme para ser el mejor. Aún así no estaba preparado para escuchar mi nombre en la ceremonia final. Eso me sorprendió gratamente y creo que el mayor aprendizaje es tener confianza en la calidad de lo que estamos haciendo y aprendiendo. Este premio enaltece la labor de mis maestros, de José Francisco Del Castillo, de la Escuela de Violín y de El Sistema.
-¿Cuál fue el momento o vivencia que más lo marcó en esta experiencia internacional?
-La noche antes del concierto final me encontré en el comedor con el lutier José Luis España, quien fabricó la réplica del Cannone, Guarnerius o Guarneri de Gessú , como se conoce al modelo de violín que perteneció al maestro italiano Niccoló Paganini. Él me preguntó que si yo quería probar el sonido de este violín y, por supuesto, acepté hasta con muchos nervios porque sentí que era un gran compromiso. Cuando lo tuve en mis manos me quedé extasiado. El sonido ronco y hasta tenebroso de sus cuerdas, con una nota de Sol muy equilibrada me transportó a otra dimensión. Por eso, cuando me lo dieron el día de la ceremonia, no podía creerlo. Fue algo mágico.
El viernes 19 de octubre podrá mostrarlo al público en todo su esplendor, durante el concierto que abre el Ciclo Brahms con la Sinfónica Simón Bolívar (SSB), en el que interpretará el Concierto para violín en Re Mayor, bajo la dirección de Pablo Castellanos.
-¿Qué mensaje desea ofrecer a los jóvenes que siguen sus estudios musicales dentro de El Sistema?
-Que sigamos con entusiasmo haciendo nuestro trabajo. Todo esfuerzo siempre vale la pena, yo en este momento no estoy participando en ninguna orquesta porque voy a seguir con dedicación mis estudios universitarios, pero voy a seguir trabajando siempre con mi violín entre las manos. Mi deseo es dejar en alto el nombre de Venezuela donde quiera que esté, y seguir difundiendo la labor educativa y ciudadana que se hace dentro de El Sistema.
El modelo artístico, pedagógico y social sigue sumando logros al Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, cuyo órgano rector es la Fundación Musical Simón Bolívar, adscrita al Ministerio del Poder Popular del Despacho de la Presidencia y Seguimiento de la Gestión del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela.