El contrabajo de Óscar Luque se encuentra con la batuta de Rafael Payare
Desde niños, Luque y Payare son parte del Sistema de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela y ahora son sus embajadores en territorio internacional. Su afuera no los aleja de su tierra. Por eso, este sábado 31 de mayo a las 5:00 p.m., en el Centro Nacional de Acción Social por la Música, actúan con la que también ha sido su familia más cercana: la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela
Rafael Payare es el director de la Sinfónica de Ulster, en Irlanda del Norte, y desde que ganó la Competencia de Dirección Malko 2012, ha dirigido más de 30 orquestas de Europa. Óscar Luque fue invitado a tocar en la fila de contrabajos de la Filarmónica de Berlín durante una temporada este año, luego de ganar el primer premio del Concurso Internacional de Contrabajo “Rubato Strings” y de haber obtenido el segundo lugar en la Convención de la Sociedad Internacional de Contrabajistas en Nueva York, en 2013. Estos dos venezolanos se encontrarán el sábado 31 de mayo de 2014, a las 5:00 p.m., en el Centro Nacional de Acción Social por la Música, en Quebrada Honda.
Será un concierto en familia, confiesa Luque. Lo dice no sólo porque él y Payare son amigos de toda la vida, sino porque actuarán con los músicos con los que han compartido atril durante más de la mitad de sus vidas: los que hoy conforman la Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela. Esta vez, desde el podio y desde el lugar del solista, Payare, quien era el principal de cornos de la esta orquesta hasta el 2012, y Luque, quien aún forma parte de la fila de contrabajos de la orquesta, demostrarán por qué sus nombres ya ocupan sitios importantes en el ámbito orquestal extranjero.
El concierto, que tiene entrada gratuita, comenzará con El aprendiz de brujo, del compositor francés Paul Dukas, y continuará con el Concierto para contrabajo, de Eduard Tubin, que es uno de los conciertos más conocidos del compositor estoniano. Tubin se inspiró justamente en la música folklórica de Estonia para escribir esta obra. “Se trata de un concierto que exige mucha resistencia por parte del solista. Tiene, además, la particularidad de que, a diferencia de otros conciertos para contrabajo, tiene una orquestación grande, que exige mucho sonido, y que incluye instrumentos no muy comunes en este tipo de obras, como el clarinete bajo y la tuba”, comenta Luque. El concierto finalizará con la Sinfonía n° 1 en fa menor, de Dimitri Shostakovich.
La presentación de los músicos venezolanos forma parte de la programación artística del Sistema de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, cuyo órgano rector es la Fundación Musical Simón Bolívar, adscrita al Ministerio del Poder Popular del Despacho de la Presidencia de la República y Seguimiento de la Gestión de Gobierno.