El proceso de selección de la nueva Sinfónica Nacional Infantil de Venezuela supera todas las expectativas
Se han inscrito para participar en las audiciones casi 1200 niños en Venezuela
Prensa El Sistema
Los procesos de formación de la Sinfónica Nacional Infantil de Venezuela (SNIV) se han convertido en una tradición musical dentro la vida artística del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, así como del país. Decir “yo formé parte de la Nacional Infantil del año…” es un honor y un privilegio. Este 2022, en medio de un ambiente festivo se viene realizando el proceso de audiciones en los núcleos de Venezuela, que ya arriba a su fase final, para conformar lo que será la nueva selección infantil, que posteriormente realizará una gira de conciertos en varias ciudades, para mostrar al público los 140 niños más talentosos de la nación.
“La convocatoria ha estado llena de alegría, esperanza e ilusión entre los niños y jóvenes de 8 a 14 años que optan por ser seleccionados dentro de la nueva Sinfónica Nacional Infantil de Venezuela. Estamos a mitad del proceso de audiciones y hasta ahora hemos observado un nivel musical muy alto que refleja todo lo que se trabaja día a día con los profesores que enseñan constantemente a nuestros músicos para que cada vez que sean mejores”, expresó Andrés David Ascanio Abreu, Director Académico Musical de El Sistema.
De estos procesos de audición y selección, nació la Sinfónica de la Juventud Venezolana Simón Bolívar, la orquesta sinfónica más exitosa del país, que más adelante se profesionalizó y pasó a ser la Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, que bajo la batuta del Maestro Gustavo Dudamel llegó a ubicarse entre las 10 mejores orquestas del mundo, siendo la primera de Latinoamérica en lograrlo. Otros frutos exitosos han sido la Sinfónica Juvenil Teresa Carreño y la Sinfónica Juvenil de Caracas, que también pasaron a ser agrupaciones profesionales realizando exitosas giras por Estados Unidos, Europa y Asia.
Había muchas expectativas este 2022, porque es primera vez que se hace una selección luego de la pandemia del Covid-19, en este sentido el profesor Jesús Morín explicó: “este año hasta ahora se han registrado 1169 niños y jóvenes, mediante el formulario que se llena para formalizar el proceso de inscripción, aunque siempre se agregan más con los músicos que van llegando y se anotan directamente en el lugar. Este número es bastante similar en el nivel de participación al del último proceso de selección nacional realizado antes de la pandemia, lo cual superó totalmente nuestras expectativas y evidencia la excelente motivación que existe entre nuestros músicos”.
La SNIV tiene varios propósitos, uno de los principales es consolidar un proyecto de alto nivel musical, con los mejores niños y jóvenes entre 8 y 14 años de edad en todo el país, para generar una selección nacional. Este proceso no es exclusivo de la comunidad de El Sistema, también pueden participar niños de cualquier lugar pertenecientes a otras escuelas. En el resto del mundo no se consigue una orquesta de este estilo, muchos programas internacionales tienen orquestas juveniles, pero una nacional infantil, donde audicionan miles de niños es algo que solo se da en Venezuela, por lo que El Sistema sigue siendo un ejemplo universal del desarrollo musical infantil.
“Otra de las grandes expectativas que tenemos en cada proceso de selección es saber cómo sonará la nueva orquesta en su primer ensayo, ver la reacción de esos niños y niñas cuando comienzan a conocerse, de distintas regiones y culturas de nuestro país, es maravilloso ver ese compartir entre ellos, siendo testigos de cómo se van conociendo, generando una hermandad que viene natural porque en El Sistema siempre enseñamos que somos una gran familia, pero cada vez que existe este compartir en los seminarios de la SNIV se crea un lazo muy bonito”, destacó el maestro Andrés David Ascanio.
Para Jesús Morín, la SNIV se convierte en un motor del desarrollo musical: “Entre esos 1169 niños que están participando actualmente, quedarán solo 140, entonces se genera una motivación de estudio muy fuerte entre ellos, que a su vez sirven de ejemplo y de estímulo para sus compañeros de núcleos que no quedaron seleccionados, porque surgen retos competitivos muy positivos, esto eleva el nivel musical infantil en todos nuestros centros de formación, en función del desarrollo de todo El Sistema como tal”.
“Esta gran orquesta infantil no solo consiste en el producto final que son los niños que veremos en la orquesta ya conformada dando conciertos y realizando giras; va más allá, porque alrededor de esta selección, se generan otros proyectos como las orquestas infantiles regionales, encuentros internúcleos, orquestas infantiles estadales o de varios estado juntos, la unificación de un repertorio a nivel nacional y los conciertos que estos ofrecen a sus comunidades, entre muchas otras actividades”, agregó Morín.