Oswaldo Parra destacó la importancia de los logros en colectivo
Después de establecer un amplio historial de participaciones en importantes competencias musicales del ámbito internacional, el maestro trombonista regresó a El Sistema para transmitir sus enseñanzas a los jóvenes instrumentistas
Prensa El Sistema
Habiendo iniciado sus estudios musicales en el Núcleo Guanare bajo la tutela del reconocido maestro Ángel Miguel Sánchez, el joven trombonista Oswaldo Parra comprende la importancia de la disciplina y constancia individual a la hora de aprender a dominar un instrumento musical. No obstante, también señala el trabajo en equipo y la cordialidad entre músicos como factor clave para el progreso artístico.
De esto y sus experiencias habló con niños, jóvenes y músicos profesionales que le acompañaron durante su exposición en nuestra Sala Genera de Ensayo N° 3 dirigida a muchos ejecutantes de trombón. Además de afinar la técnica y ofrecer algunos trucos para una mejor ejecución, habló de su carrera musical dentro y fuera de Venezuela.
Nos contó que al término de un año dedicado al estudio de solfeo,se dedicó a la ejecución del instrumento de viento y metal. Durante este periodo de aprendizaje formó parte de varias agrupaciones tales como el Ensamble de Trombones de los Llanos Occidentales Simón Rodríguez, Ensamble de Metales Centauro Brass y la Orquesta Sinfónica Juvenil de Guanare.
Posteriormente se trasladó a Caracas con la intención de acrecentar sus conocimientos del trombón. Bajo esta circunstancia, continuó sus estudios en el Conservatorio de Música Simón Bolívar, llegando a formar parte de diversas orquestas y agrupaciones de renombre en el país como La Banda Sinfónica Simón Bolívar, Simón Bolívar Big Band Jazz, El Venezuela Trombone Ensamble y la Orquesta Sinfónica de Venezuela.
Estas experiencias dentro de El Sistema le permitieron desarrollarse y evolucionar como instrumentista, hasta lograr su sueño de llegar a París. Debido a su desconocimiento del idioma nativo, se apegó a la congregación latina residente en Francia, cuya estrecha relación lo ayudó a enriquecer sus conocimientos e integrarse a esa sociedad. Tras dos años de crecimiento artístico, viajó a Suiza para hacer una licenciatura en la Alta Escuela de Música de Lausanne, que aún sigue su curso.
Bondades de la práctica colectiva
Durante el encuentro con los alumnos Oswaldo Parra destacó la cordialidad durante la práctica musical. Habiendo dedicado gran parte de su juventud en el aprendizaje constante, el trombonista Oswaldo Parra comprende la necesidad de facilitar el camino de los aspirantes hacia la excelencia, destacando la humildad como un elemento importante a la hora de intercambiar conocimientos. “Instruir es también una manera de aprendizaje. Un maestro puede aprender de sus propios alumnos en beneficio de embellecer su sonido”. Este fue uno de los puntos orgánicos de su clase magistral.
Formar parte de un ensamble u orquesta implica un desarrollo homogéneo. El crecimiento colectivo proporcionará mejoras individuales a cada integrante. A pesar de haber participado en distintas competencias de solistas, el maestro Oswaldo Parra señaló como egoísta el deseo de superación individual permanente. Considera que la integridad es un valor fundamental en la vida artística.
Los instrumentistas deben procurar ascender como colectivo. Esto resulta fácil de lograr en el ambiente de calidez y compañerismo de un ensamble. El compartir es la clave del progreso. Los músicos no debemos ser egoístas« afirmó el maestro Parra.
También destaca la labor de instrucción musical por parte de El Sistema, la cual es reconocida en muchos países de Latinoamérica y Europa. Como educador, siente que su compromiso no está en lucir sus habilidades ante sus alumnos sino en colocar toda su experiencia y sabiduría a la disposición de todo aspirante. Actualizar la información que estos posean para poder forjar ejecutantes mucho más diestros en generaciones posteriores a la suya. Así mismo, destaca el entusiasmo de los estudiantes por adquirir nuevas técnicas, así como también el gran talento musical de nuestro país.
También enfatizó la labor del maestro José Antonio Abreu al dirigir a una cantidad incalculable de niños y jóvenes hacia el rumbo artístico. Incluyendo a aquellos procedentes de comunidades no pudientes. Considera que el esfuerzo del maestro Abreu representa la reintegración de muchos de ellos a una sociedad que se caracteriza por principios tales como la humildad, integridad y tenacidad.
Seguimos impartiendo conocimiento y formando músicos en El Sistema, cuyo órgano rector es la Fundación Musical Simón Bolívar, adscrita al Ministerio del Poder Popular para el Despacho de la Presidencia y Seguimiento de la Gestión de Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela