Michael Form sopló velas con buenos deseos para la Orquesta Barroca Simón Bolívar
El flautista y director de origen alemán, quien alzó su batuta para celebrar el primer aniversario de esta agrupación de El Sistema, se apoya en su profesionalismo para seguir refrescando la música antigua
Que los músicos conozcan el contexto en que fueron escritas las obras es importante para el director Michael Form, pues siente que la interpretaciòn debe ajustarse a los sentimientos que movieron al compositor. Sin embargo, considera innecesario que los músicos se ciñan a lo establecido en el pasado para acercar al público con la historia.
De esto conversaba el también flautista con los integrantes de la Orquesta Barroca Simón Bolìvar antes del concierto con el que la orquesta celebró su primer aniversario como agrupación regular del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela. Form, quien alzó su batuta para dirigir este concierto, apuesta por la innovación en la música antigua.
En esta oportunidad, Michael Form reafirmó su gusto por trabajar con los integrantes de la Orquesta Barroca Simón Bolìvar. “Me llena mucho; hay muchas cosas nuevas para enseñar y trabajo con mucho entusiasmo con estos músicos que son muy atentos. Este trabajo tiene algo muy especial para mí porque me ofrece una perspectiva distinta, sobre todo por la actitud de la gente, dado que en Europa, por ser el barroco un movimiento ya establecido no es tan especial”, expresó Form.
¿Qué diferencia encuentra del trabajo que se hace en Europa con sus aportes en Venezuela?
En Europa esta música se hace desde hace mucho tiempo y a mi entender se cometen muchos errores relacionados con esa vieja tradición, que nos impone formas que para mí no son correctas. Entonces, cuando trabajamos el repertorio barroco aquí lo hacemos desde cero y para mí se vuelve más interesante, porque veo mejor lo que llamo “errores”, que yo mismo tengo, incluso, y se logra algo menos rígido.
¿Qué es lo que específicamente usted considera como errores?
Es que yo he estudiado los tratados que se relacionan con los movimientos musicales y sus compositores y veo que no hay formas establecidas para tocar de una u otra manera y en Europa hay mucha resistencia para cambiar esto. Asì que, finalmente, siento que el trabajo que se hace en otros lugares es más eficaz para acercarse al público.
¿No teme correr el riesgo de que lo cuestionen por no seguir esos patrones?
Es que si tenemos más libertad podemos refrescar. Además es importante aprovechar el potencial de las orquestas de El Sistema. El hecho de que la Orquesta Barroca esté dedicada exclusivamente a estudiar y mostrar estos repertorios permite profundizar más en ellos, conocerlos mejor y no es atrevido decir que se hacen verdaderos especialistas. En cambio, en Europa, los conciertos se hacen con grupos que se reúnen para un proyecto, ensayan y luego cada quien se va a otra cosa.Por lo tanto, necesitan resultados rápidos y los músicos no entiendan realmente lo que hacen. Eso es muy diferente aquì y es lo que me gusta.
¿Qué tan saludable puede ser para el Barroco que su música se toque más libremente?
Lo que nos gustaría en el futuro es hacer una gira en Europa y mostrar lo que hemos logrado para devolverlo al lugar donde nació y que se vea que si se puede hacer la música con mayor frescura y tratar de que se pueda recuperar ese entusiasmo que allá se perdió. No tengo ninguna duda de que lograremos un impacto interesante tanto para los músicos de aquí, como los de allá.
¿Qué le regala a la Orquesta Barroca en este primer cumpleaños?
Yo he visto a esta agrupación desde antes de que se convirtieran en orquesta, he visto su progreso, y mi mejor deseo es que sigan alcanzando nuevos saltos en su nivel, para que lleguen a tener el reconocimiento que merecen.